HIPERPIGMENTACIÓN CUTÁNEA

HIPERPIGMENTACIÓN CUTÁNEA

El tratamiento médico estético de las manchas en la piel se realiza en los casos en los que éstas tengan naturaleza benigna. La dermatología estética aborda los problemas de pigmentación que se van produciendo en el cuerpo humano a lo largo de los años debido al exceso de melanina.

La hiperpigmentación cutánea se puede producir por diversos factores, entre los que destaca la excesiva exposición de los cuerpos al sol. La herencia genética también condiciona aquí el estado de la piel, lo mismo que la edad de cada persona, algunos factores hormonales, y lesiones o infecciones cutáneas.

Si existe cierta preocupación en torno a una mancha o un lunar del que no estamos seguros, por su color, tamaño, por su textura o porque nos produce dolor o escozor, lo primero es acudir al dermatólogo a que descarte la presencia de lesiones malignas. Entonces sí, llegará después el turno a tratamientos como el peeling, el láser o la crioterapia. Pero primero es necesario saber de qué tipo de mancha estamos hablando. Estas son las más comunes que se tratan en las clínicas de medicina y dermatología estética.

TIPOS DE MANCHAS MÁS COMUNES EN LA PIEL

Las más comunes a tratar en las clínicas son el melasma, que reconoceremos porque son las manchas que aparecen a veces durante el embarazo, los nevus o lunares y el lentigo.

Melasma

El melasma recibe también el nombre de cloasma. Aunque se le conoce popularmente como las manchas del embarazo no afecta sólo a las futuras mamás. Su origen se encuentra en cambios hormonales, por lo que también es frecuente durante la menopausia y a consecuencia de la toma de anticonceptivos. Esta pigmentación marrón es simétrica y aparece en el rostro y en los brazos. 

Lentigo

El Lentigo consiste en una mancha marrón oscura o clara. Tiene una forma bien delimitada, pocos centímetros de diámetro y se debe al aumento de número de melanocitos. Aparecen en las partes del cuerpo que se exponen a la radiación solar. El lentigo puede ser maligno, en cuyo caso requiere un tratamiento oncológico, simple, que es el que aparece durante la infancia o adolescencia y, por último, el senil, que nace en la franja de edad de entre los 30 y 40 años.

Se recomienda evitar su exposición al sol.

Los nevus o lunares

Al lunar, que puede ser rojizo o de diferentes tonos de marrón, le sucede lo mismo. Hay que protegerlo del exceso de sol y seguir las recomendaciones sanitarias. Puede haber aparecido a causa del sol o bien estar presente desde el nacimiento.

Las efélides o pecas

Con un claro componente hereditario, tienen pequeño tamaño y surgen por la exposición al sol. Pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, aunque la cara es su zona más habitual. 

TRATAMIENTOS ESTÉTICOS PARA TRATAR LA HIPERPIGMENTACIÓN CUTÁNEA O MANCHAS EN LA PIEL

Peeling 

Este tratamiento que exfolia la piel con un objetivo rejuvenecedor, se emplea para eliminar melasmas y lentigos. Según el estado de cada mancha, será el dermatólogo quien decidirá cuál es el producto a aplicar que más convenga. Los más empleados son el ácido glicólico, el tricloroacético y el retinoico.

Crioterapia

La crioterapia consiste en la aplicación de frío sobre la piel, con el objetivo de destruir las células del tejido que queremos eliminar. El elemento empleado para la congelación de la mancha es el hidrógeno líquido, que, por otro lado, se descarta absolutamente en caso de lesiones malignas.

Láser

Es lo demandado gracias a sus buenos resultados. Se emplea en lesiones de poco tamaño y profundidad. Existen diferentes tipos, pero idéntica base en el procedimiento: liberación de energía de alta intensidad en un tiempo breve.

Luz Pulsada

Muy usado para el tratamiento del lentigo, su radio de acción es selectivo, calentando el tejido dérmico que rodea la lesión, pero sin dañarlo.